Londres, Inglaterra.- Trish Vickers, una novelista inglesa, que además es invidente, pasó dos semanas escribiendo una novela con una pluma sin tinta.
Vickers perdió la vista hace siete años debido a la diabetes, pero puede escribir gracias a que utiliza hojas de papel con guías elásticas para orientarla mientras redacta.
Ella quiso mostrar la novela a Simon, un joven que le ayuda a realizar las tareas domésticas, pero lo que Simon vio fue que el escrito de Trish no terminaba, pues las últimas 26 páginas estaban en blanco.
Sin embargo, no todo estaba perdido, Vickers y Simon acudieron a la Policía local, quienes, para fortuna de Trish, lograron descifrar, mediante luces dirigidas en diferentes ángulos, las marcas del bolígrafo sobre el papel en blanco.
"El legado de Grannifer" es el título de la novela, la primera que Vickers escribe desde que perdió la vista, y narra la historia de una mujer que pierde su trabajo, su novio y su bisabuela.
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