Diseñador gráfico asegura haber encontrado animales que rodean a la Gioconda, así como su significado en documentos de Leonardo Da Vinci, dando como resultado una supuesta referencia metafórica a la envidia y los celos.
¿Qué tanto esconde La Mona Lisa? Durante varios años, la Gioconda ha gozado de gran popularidad, no sólo por ser considerada una gran obra de arte, sino por todos los secretos y rumores que se han generado alrededor de ella.
¿Quién es La Mona Lisa? ¿Está sonriendo? ¿Quién y por qué la robó en 1911? ¿Por qué la historia del Código da Vinci? Es así como la pintura constantemente se encuentra en el ojo del huracán.
Hoy, la Gioconda, tiene nuevos secretos que han sido descubiertos. De acuerdo con yahoo.com y e-consulta.com, el artista y diseñador gráfico Ron Piccirillo supuestamente descubrió animales en la pintura, mismos que rodean la figura de la mujer.
Explica que en el paisaje del cuadro realizado por Da Vinci, se distinguen las siluetas de un león, un mono y un búfalo. Mientras que en el cuerpo de la Mona Lisa se dibujan las figuras de un cocodrilo y una serpiente.
Piccirillo había estado estudiando el cuadro que pertenece al estado francés y que se encuentra en el Museo Louvre, en Paris, durante ya varios meses cuando "me di cuenta que había encontrado algo importante", según declaró.
Ver los animales no es cosa fácil porque la pintura se tiene que poner de manera horizontal.
La investigación lo llevó a concluir que la Gioconda es una obra de arte que tiene un significado referente a los celos; y es que el artista, luego de encontrar a los animales, los refirió con una frase de Leonardo que dice así: "Dale una piel de leopardo, porque esta criatura mata al león por la envidia y el engaño".
Pero así como encontró dicha frase en escritos del pintor florentino, Ron Piccirillo halló otras que según él también explica a la alusión a los animales en la pintura, como que la serpiente se interpreta como envidia.
Así que asegura que Leonardo pintó a La Mona Lisa no para plasmar a un personaje real, sino para representar iconográficamente el pecado.
¿Será verdad? De acuerdo con algunos investigadores, los argumentos que el artista moderno refiere son muy pobres, ya que sólo se necesita imaginación para poder ver lo que queremos, lo que se llama pareidolia, un fenómeno psicológico que hace que nuestro cerebro nos haga creer que vemos formas en patrones indefinidos (como cuando le encontramos formas a las nubes).
Además, se sabe ya que más que una representación de pecados, se trata de un retrato.
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