La nueva presidenta de Malawi, Joyce Banda, anunció planes de anular la legislación que prohíbe la homosexualidad en el país.
La ley fue utilizada en 2010 para sentenciar a 14 años de cárcel a dos hombres que anunciaron su matrimonio.
Varios líderes occidentales dijeron recientemente que recortarían la ayuda a países que no reconocieran los derechos de los gays.
En la mayoría de los países africanos están prohibidas las relaciones homosexuales.
Recientemente en Uganda un parlamentario introdujo una ley en la que se estipulaba que la pena de muerte se podría imponer para algunas ofensas homosexuales, aunque desde entonces dijo que quería cambiar la condena a cadena perpetua.
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