La derrota del escocés Andy Murray ante el suizo Roger Federer rompió los corazones de millones en el Reino Unido, pero para la organización humanitaria británica Oxfam representó un ingreso de US$150 mil.
Todo se debe a una apuesta hecha en 2003 por Nick Newlife, quien en 2003 decidió jugarse US$2330, con probabilidades de 66 a 1, a que Federer llegaría a tener siete títulos de Wimbledon para 2019.
Newlife murió en 2009 pero en su testamento dejó todas sus pertenencias, incluida el recibo de la apuesta, a Oxfam.
Lealtades divididas
En declaraciones a la BBC Andrew Barton, director de relaciones de mercadeo de Oxfam, dijo que ver el partido le generó emociones opuestas.
"Estaba sentado mirando el tenis y a cada rato me encontraba pidiendo que ganara Murray, especialmente en ese largo juego del tercer set".
"Y entonces mi cabeza me decía a mí mismo 'Andrew, recuerda que Oxfam se lleva el dinero si Federer gana'".
"Es tan desafortunado que lo haya logrado contra Andy Murray", agregó.
Doble derrota para William Hill
La casa de apuestas William Hill dijo que ya previamente tuvo que pagar más de US$25 mil por otra apuesta de Newlife, quien también pronosticó que Federer ganaría 14 torneos de Grand Slam.
El maestro suizo alcanzó esa marca en junio de 2009 cuando se impuso en el Abierto de Francia.
En ese entonces Graham Sharpe, director de comunicaciones de William Hill, indicó que "el señor Newlife era claramente un astuto apostador deportivo cuya facultad de identificar potenciales superestrellas le hizo ganar mucho dinero cuando estaba vivo".
"Sin embargo asegurarse de que una respetada organización benéfica se beneficiara de apuestas que se concretaron después de su muerte es algo sin precedentes en mis 30 años en la industria de las apuestas".
Por su parte Barton destacó la importancia de las donaciones individuales para Oxfam.
"Las herencias representan el 12% del total de los ingresos de personas, así que son esenciales para nosotros y este caso demuestra que pueden ocurrir de todas las formas imaginables".
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