Detroit, EUA.- Un ex jefe de policía y cinco detectives en Romulus, un suburbio de Detroit, utilizaron dinero de decomisos de drogas para pagar prostitutas, alcohol y marihuana, y para comprar un salón de bronceado que después fue administrado por la esposa del entonces jefe, alegó un fiscal de condado.
El ex jefe Michael St. Andre, su esposa Sandra y cinco detectives asignados a una unidad de investigaciones especiales comparecieron el martes por acusaciones de que hacían parte de una empresa criminal que se extendió por unos cinco años. Más de 49 mil dólares en efectivo confiscados por la unidad de investigaciones especiales de Michael St. Andre se extraviaron.
El fiscal del condado de Wayne, Kym Worthy, dijo que falsificaron documentos e informes de policía para ocultar el uso ilegal y el reembolso de fondos. Numerosos depósitos en efectivo se realizaron en las cuentas bancarias personales de St. Andre, dijo Worthy. Parte del dinero se utilizó para comprar un salón de bronceado, para pagar otros gastos personales y en un viaje de amigos de la familia, de acuerdo con Worthy.
Ninguno de los ingresos se incluyó en las declaraciones de impuestos de la pareja.
"La presunta conducta ... en este caso define una cultura de corrupción y codicia en su esencia", dijo Worthy a periodistas. "A pesar de que una investigación de esta naturaleza toma cientos de horas de tiempo, es crucial que levantemos cargos contra los acusados donde los encontremos, incluso cuando están en un departamento de policía".
Michael St. Andre se retiró a principios de este mes.
La oficina de Worthy dijo desconocer si los acusados tenían abogados defensores. El teléfono de St. Andre timbró sin respuesta el martes por la tarde, y las líneas de las casas de los detectives estaban desconectadas o no aparecían en las listas.
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