México, DF.- Hace casi 3 años, Patricia Lefranc fue atacada por su novio, y desde entonces ni las cicatrices físicas ni psicológicas se han podido borrar; hoy asiste a un juicio en su contra.
Una tarde, la belga de 45 años bajó a la entrada de su edificio para recibir un paquete; pero al llegar ahí no pudo hallar nada, pues de inmediato fue rociada con ácido sulfúrico que le provocó quemaduras de tercer grado en el 30 por ciento de su cuerpo y rostro.
Lefranc pasó 3 meses en coma inducida, y la única explicación que el atacante, su antiguo novio, Richard Remes, da es que sólo se trató de una broma que le salió mal.
"No quería causarle semejante daño, y prueba de ello es que rebaje el ácido", dijo Remes.
En el juicio dijo que investigó sobre el ácido sulfúrico por curiosidad, y que entonces se le ocurrió que podía utilizarlo contra Lefranc como una advertencia, pues ella quería dejarlo.
"La idea (de la agresión con esta sustancia) fue germinando en mi espíritu. Quería marcarla, pero nunca imaginé que sería tan rápido", señaló. "Yo amaba sinceramente a Patricia Lefranc (...). Pero con ella, un día era blanco y otro negro, un día te amo y otro te dejo".
Los testimonios y las pesquisas apuntan a un ataque premeditado, por lo que se enfrenta a 30 años de prisión.
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