miércoles, 2 de noviembre de 2011

LA VECINA
Una hermosa vecina va al departamento de su vecino quien, por supuesto, corre a abrirle y ella le dice:
- Acabo de llegar y tengo unas ganas locas de divertirme, emborracharme y tener mucho sexo ¿tienes algo qué hacer esta noche?
Y el tipo contesta:
- ¡¡Por supuesto que no!!
Entonces ella le dice:
- Entonces ¿podrías cuidar a mi perrito?

EL TRAPITO
Afrontando toda la ingenuidad de Tarzán, el día que Jane lo conoció le dio una clase de sexualidad:
- Mira, Tarzán, eso que tienes ahí colgando entre las piernas es tu trapito y esto que tengo aquí es una lavadora... ¡Y tú debes lavar ese trapito en esta lavadora!
Ese día y los siguientes cinco días con sus noches Tarzán estuvo lave y lave, y cuando Jane logró respirar le dijo:
- ¡Mira, Tarzán, la lavada del trapito no puede ser tanta ni tan seguido, porque se te puede gastar!
Con aquel comentario, el Hombre Mono se apartó un poco de Jane. Pero, después de pasar un mes sin que éste usara la lavadora, Jane, extrañada, le preguntó, preocupada:
- Tarzán, ¿qué te pasa? ¿Por qué no has querido usar más mi lavadora?
- ¡Es que Tarzán aprender a lavar a mano!

LENTA
- No me molestes -le dice un soldado a otro-, ¿no ves que estoy escribiendo a mi novia?
- ¿Y por qué escribes tan despacio?
- Es que ella no sabe leer rápido.

PASTILLAS
- ¿Qué tomas Paquito?
- Unas pastillas para reactivar mi memoria, ya he mejorado mucho.
- ¡Uy, qué bien! ¿y cómo se llaman?
- La verdad, no me acuerdo.

EL PUENTE
Estaba un hombre caminando por la playa, de repente alzó los ojos al cielo y con toda la devoción que pudo, pidió a Dios que le concediera un deseo. Dios al verlo se apiadó de él.
- Pide y se te dará -exclamó una voz desde lo alto.
- Mira Dios, tengo una novia que vive en Cuba, yo vivo en Florida y me cuesta mucho ir a verla, ¿No podrías construirme un puente que una la isla con la península?
- Eso que me pides -respondió Dios-, es un trabajo muy materialista. Tendría que erguir grandes pilares de hormigón que profanarían mis océanos. Debería emplear cientos de toneladas de hierro y asfalto, reflexiona hijo mío, pídeme algo que me honre y glorifique. A lo que el hombre respondió:
- Me he divorciado tres veces, me gustaría tener el don de saber escuchar a las mujeres, comprenderlas, saber por qué dicen no cuando quieren decir sí y viceversa, qué quieren decir cuando callan, por qué lloran sin motivos, ¿Cuál es el secreto para hacer feliz a una sola mujer?
Dios desde lo alto carraspeó y respondió a su deseo con una pregunta:
- ¿Y de cuántos carriles dices que quieres el puentecito?

VAQUERO
Llega un vaquero a un bar y le dice al cantinero:
- ¡Cantinero una copa!
El cantinero se la sirve, y el señor se la da al caballo. El caballo se toma la copa y el señor pide otra copa para su caballo, el caballo se toma la copa, y entonces le pregunta el cantinero:
- ¿Señor, usted no va a tomar nada?
Y le dice el señor:
- ¡No, yo manejo!

BORRACHO
Un borracho llega a un condominio, y toca el portero electrónico.
- ¿Diga? Le responde una señora.
- ¿Está su marido?
- Sí, ¿por qué?
- Disculpe.
Y se va a otro condominio, y vuelve a llamar en los próximos tres condominios.
Llega al cuarto condominio y le hace la misma consulta:
- Señora, ¿está su marido?
Y ella le responde:
- ¡No, no ha llegado todavía!
Y el borrachito le dice:
- Señora, por favor puede bajar y decirme si soy yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario