jueves, 10 de noviembre de 2011




BORRACHOS
Bueno, en una cantina están bebiendo dos tipos, y ya estaban en un estado lamentable y uno le dice al otro:
- Vamos a mi casa.
- No, vamos a la mía -responde el otro.
Y así la pasaron hasta llegar a la casa y uno de ellos dijo:
- Sí, esta es mi casa.
- No, esta es mí casa.
Uno de ellos dice:
- Bueno, toquemos a la puerta y al que reconozcan es el de la casa.
Tocan la puerta y sale una señora y dice:
- ¡Qué lindo, padre e hijo borrachos!

REFRESCOS
Llega un ciclista muy cansado a un bar que estaba lleno hasta las tejas, y le dice al camarero:
- ¡Camarero, por favor!
- ¿Si?
- ¿Me da una caja de Fanta?
- ¿De limón o de naranja?
Y el ciclista dice:
- Me da igual, es para sentarme.

INFIEL
La niña pregunta a la madre, qué significa infiel, la madre le dice:
- Si yo anduviera con otro hombre que no fuera tu papá, yo sería una mujer infiel, si tu papá anduviera con otra mujer que no fuera yo, él sería un hombre infiel.
La niña después de meditar unos segundos, dice:
- Mamá, si mi papá anduviera con otra mujer que no fueras tu, no sería un infiel, sería un hombre muerto.

SUEGRA
Un hombre está en el entierro de su suegra. Después de echar tierra sobre el ataúd, dice:
- Querida suegra, usted ha sido como una madre para mí.
En ese momento un pájaro, sobrevolando el cementerio, le caga en la cabeza. El hombre levanta la cabeza hacia el cielo y dice:
- ¡Ah! ¿Usted ya se reencarnó?

PEPITO
Iba Pepito por la calle y ve a un niño y le dice:
- Hey, ¿conoces a Juan?
El niño le pregunta:
- ¿Qué Juan?
- El que te pegó en el zaguán.
El niño corre donde su papá y le cuenta lo sucedido, el padre le dice que vaya donde Pepito y le pregunte por Saúl y cuando él le pregunte, qué Saúl, él le diga:
- El que te pegó en el baúl.
Así lo hizo el niño y cuando encontró a Pepito le preguntó:
- ¿Conoces a Saúl?
- ¿El primo de Juan?
Y el niño le pregunta:
- ¿Qué Juan?
- El que te pegó en el zaguán.

TAXISTAS
Juan se encuentra en una gran avenida esperando un aventón, en eso pasa un gallego y le dice que suba que él lo va a llevar. El gallego va a 120 Km por hora y aparece el semáforo en rojo.
- ¡Detente! ¡detente! -le dice Juan.
El gallego le contesta:
- ¡No pasa nada! Mi hermano maneja igual y nunca le ha pasado nada.
Sigue, y cuando llegan a otro semáforo en rojo.
- ¡Frena loco! ¡frena! -dice Juan.
El gallego le vuelve a decir:
- Mi hermano maneja igual, y nunca le ha pasado nada.
Y prosigue a toda velocidad. El gallego ve un semáforo en verde y se mete una tremenda frenada, Juan le dice:
- ¡Oye, qué te pasa estamos en verde!
El gallego responde:
- ¡No! ¡Hay que tener cuidado, no vaya a pasar mi hermano!

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