Minsk, Bielorrusia.- Este portero cometió un autogol que sorprendió a todos los que estaban presentes en el terreno de juego.Parecía una jugada que no llevaba algún peligro, pero él se encargó de hacer la travesura.
El conjunto rival tenía el esférico. Buscaban hilar la jugada, pero estaban cerrados los espacios. De repente el jugador que conducía el balón, lanzó un servicio que llegó hasta el área rival. El portero lo veía venir, seguía su trayectoria y se dirigía hacia la línea final.
Pudo haber dejado que siguiera su camino, pero…
Decidió otra cosa y no le salió como hubiera querido. El balón impactó en su mano y cambió su destino, se metió en su propio arco.
Los presentes se sorprendieron por lo que habían visto.
El oso lo cometió el portero Artem Gomelko del equipo Dnepr Mogiley en el duelo contra el Torpedo Zhodino de la liga bielorrusa.
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